Entre el año 1956 e inicios de 1957, un grupo de personas relativamente jóvenes y en su mayoría mujeres, se lanzan a la Patagonia, impulsadas por una clara visión evangelista, a fin de pregonar las buenas nuevas de salvación en el sur argentino. Transcendiendo a su ves las fronteras varias jóvenes, e iniciando las actividades, pese al inclemente invierno, primeramente en la ciudad de Punta Arenas Chile, y luego tras una exitosa campaña en un viejo teatro de la ciudad de Puerto Natales, nace una floreciente Iglesia, compuesta de hombres y mujeres convertidos al evangelio y con marcadas transformaciones en sus vidas.
Es así como hasta el día de hoy la Iglesia Betel Movimiento Cristiano y Misionero, con domicilio Andres Bello N° 422 de la ciudad de Puerto Natales Chile, sigue su marcha.